16 de junio, una fecha muy esperada en mi calendario, las hojas del mismo se han ido arrancando un tanto lentas y con una pesadez propia de los días en los que el cuerpo pide un aliento para poder descansar y reponer la fuerza que con tan mal administración se pierde en la jornada, en las épocas en que el trabajo es agotador y las labores parecen infinitas y tan extensas.
16 de junio representa un día grande en mi corta (o larga) vida, hace un par de años no era siquiera digno de observar, pero desde que llegaste tu (bien lo sabes) todo a mi alrededor cambio, hiciste que mis ideas llegaran mas lejos y que lo que era importante para mi dejara de serlo, para darle paso a ciertos detalles que no me había detenido a mirar con inquietud, ¡eso!; inquietud es lo que despertaste en mi corazón.
Un 16 de junio, termino mi ayuno de chocolate, cumpliste un año mas, Sin Bandera cerro su ultimo concierto, tu y yo juntos como nunca y la sensación de ser libre de nuevo con mi propio destino, de saber que ya no me hace falta el aire para respirar profundo y seguir dando pasos hacia mi vida adulta.
Ayer comprendí unas cuantas cosas: que mis ojos tienen que mirar los tuyos para no llorar en silencio y para gritarte lo que sea que tengan que contarte, que mis manos están incompletas porque le hacen falta tus dedos y que mi voz necesita ser escuchada por tus oídos cuando canto una canción de amor; todo eso junto a ti y ya sin España en mi cabeza.
"Te has ido... Ayer me di cuenta de ello".
