Que te extraño, no cabe ni la menor duda. Lo hago en estos momentos cuando estoy inevitablemente solo. No he logrado separarte de ciertos entes en mi mente, como cada vez que veo una ardilla o uno de esos arboles con hojas caídas que te gustan; o los caracoles y los niños a los que llamas larvas. Eso estará siempre presente, archivado bajo tu nombre y tus apellidos.
Aun despierto diciendo o (mal)diciendo tu nombre, buscándote entre mi cama. Aun no te vas, pero dueles menos. La distancia puede ser tan relativa y se puede romper tan pronto que a veces he tenido miedo de cruzarla a carrera en uno de mis arranques. Me he ingeniado ciertos métodos para no hacerlo. No he estado solo; tu ya sabes que odio sobremanera estarlo, porque apareces tu. He dormido con la ventana de mi cuarto abierta todas estas noches como esperando a que subas de repente por ella; como si no supiera que da a una pared.
Todo en la vida sucede por algún motivo y a nosotros nos toca buscar esos motivos; aunque sea en el dolor de una perdida. Incluso en eso se puede encontrar la fuerza para seguir adelante con la vida como es y no como debería o soñamos que sea.
Me he hecho a la idea de todo este remolino de sentimientos y sinsabores. Incluso me he atrevido a salir de nuevo, a mostrarme con los demás, a continuar sin ti. Por segundos invades mi mundo y bastaría con cerrar los ojos para perder la entereza; me hago el fuerte e intento disfrutar los momentos.
Alguien que ha venido a esta enorme ciudad desde un país alargado al sur del continente me ha ayudado mucho a salir de la pesadez de mis días. Me hace sentir como un guia de turistas con sus gestos de sorpresa ante las maravillas que ya no lograba ver por mi propia cuenta en mi ciudad. El no me miente y yo ya he aprendido mi lección con los hombres, los príncipes y los sapos.
El corazón digiere igual que el estomago, pero mucho mas lento y con mucho mas dolor. Me he hecho creer la mala persona que siempre fuiste y el espejismo que yo quería ver montado en mi caballo ilusión, andando por los terrenos de la realidad. No me di cuenta de lo que eres en verdad y ahora, de a poco, lo hago y lo entiendo.
Hombres vienen, vendrán, se quedaran y se marcharan; como las olas. Pero no hay que olvidar la regla primordial, con eso ya se esta del oro lado.
I GET ALONG.
"Fue un placer conocerte
y tenerte unos meses,
aunque esos meses fueron
el principio y el fin
de un amor tan bonito;
aunque no me quisiste
pero yo si te quise
y hoy me tengo que ir.
Muy feliz fui contigo
me conforme con nada
y hoy te quedas sin mi,
y a pesar de que nunca
me dijiste te quiero..."
